César Chirinos: Expresar al vivo

No entienda Ud. la frase literalmente; entiéndala mejor como la manera de escribir de alguien que se expresa con líneas y figuras en el espacio. Esto sería, en síntesis, lo que pudiéramos decir que es Eugenio Rivas en los últimos años de su vida andariega. Vale decir, que su arte está enmarcado en los signos gráficos de su lengua o de sus sentidos. Es un dibujo nervioso, esquemático, siempre aplicado, en cierto grado, al automatismo, que se dicen preconizaron los surrealistas, aunque de sobra sabemos que las culturas ágrafas no lo preconizan sino que lo viven desde tiempo inmemorial. Observamos, no deducimos, nunca deducimos pero jamás dejamos de observar, atendiendo a la audacia ideológica y picaresca que conocemos de Eugenio, que sus líneas y sus figuras son sueños, sus fantasías alucinatorias, su confabulación con el núcleo oculto y psicofísico de la sociedad, el más golpeado pero también el de más pureza. Un arte sencillo y espontáneo que camina de la mano con su vida cotidiana, yo diría que camina con su sombra, con el eco de lo que los surrealistas llamaron el "automatismo gráfico". Así vemos que sus líneas y sus figuras expresan libre y espontáneamente lo que él desea aunque vayan en contra del dibujo "ideal". Eugenio puede mostrarnos un pez del lago con aletas tan grandes que parecen alas, con las cuales puede estar una temporada allá y otra aquí.